El hijo escondido...

Eres hoy un huesped silencioso,

que no se agita mas palpita vivo,

y creces en mi vientre poco a poco

mientras formas tu cuerpo con el mio.



Fruto eres del amor que hizo a tus padres

participar en la creación divina,

cuando unidos en una sola carne

se produjo el milagro de tu vida.



Eres nuestra esperanza, eres promesa,

suave luz que alumbra desde el cielo,

y el olvido de toda angustia o pena,

alegría signada de misterio.



Pero eres mucho mas, porque eres hijo,

fuente viva de paz y de consuelo,

lluvia mansa que el Señor bendijo

cual maná que deciende desde el cielo.